Hasta que llegó su hora 1968
Mientras los constructores del ferrocarril avanzan imparables por el desierto de Arizona en su camino hacia el mar, Jill llega al pequeño pueblo de Flagstone con la intención de empezar una nueva vida.
Mientras los constructores del ferrocarril avanzan imparables por el desierto de Arizona en su camino hacia el mar, Jill llega al pequeño pueblo de Flagstone con la intención de empezar una nueva vida.
Considerada la mejor película de la época muda de John Ford, un western alrededor del ferrocarril y el espíritu pionero de los Estados Unidos de América. El presidente Lincoln ha autorizado la construcción de un enlace entre las líneas ferroviarias de la Union Pacific y la Central Pacific. Un contratista (Will Walling) y un topógrafo (George O´Brien) emprenden viaje con el objetivo de trazar la ruta idónea, pero, aunque logran localizar un paso montañoso que permitiría el establecimiento de una conexión mucho más rápida de lo que se había esperado, el riesgo de que los nativos ataquen a los trabajadores amenaza con dar al traste con el ambicioso proyecto.